Necesito dinero ¿qué hago?
Buena parte de los mexicanos, en algún momento de su vida, se han hecho la siguiente pregunta: necesito dinero, ¿qué hago? Las razones pueden ser muchas y muy variadas: gastos imprevistos, problemas económicos acuciantes o simplemente la intención de ahorrar con un objetivo concreto, entre otras opciones. Y las respuestas a esa pregunta son también numerosas y de carácter muy diferente, especialmente dependiendo de la urgencia con la que se deba resolver la situación. En este post te mostramos algunas de ellas en función de si la necesidad apremia o no: préstamos inmediatos, casas de empeños, sitios web de segunda mano o compromiso de ahorro, ya sea de forma tradicional o con productos de ahorro a largo plazo.
Solicitar un préstamo express
No hay dudas al respecto: si necesitas dinero de forma urgente e inmediata, la mejor solución son los préstamos express como los que puedes conseguir en Credy. Su tramitación es sencilla y muy rápida, al igual que el proceso de validación, concesión y transferencia a tu propia cuenta bancaria. En la mayoría de los casos, el importe solicitado a través de la web puede llegar a transferirse en apenas 10 ó 15 minutos, al menos en los casos en los que no hay incidencias relacionadas con los datos personales aportados a través del formulario. Y eso se trata de un periodo de tiempo tan corto que es incluso inferior a lo que tardas tú mismo al solicitar un ingreso desde tu propia cuenta de ahorro, pues las trabas que ponen las entidades bancarias para la retirada de este tipo de fondos normalmente demoran la transferencia durante días. En Credy puedes acceder rápidamente a hasta 3000$ a devolver en un mes como máximo.
Acudir a una casa de empeños
Las casas de empeños son otra de las soluciones muy empleadas en México por parte de todo aquel que se pregunta a sí mismo “necesito dinero, ¿qué hago?”. En este caso, la solución no es tan instantánea, pues es necesario acudir físicamente a la casa de empeño, por supuesto adecuándose al horario de apertura y cierre del establecimiento. Además, una vez en el local, el cliente debe esperar a que los profesionales de la casa evalúen la joya o el objeto de valor para hacer una oferta al cliente. Ahí se puede iniciar una breve negociación, que demora aún más el proceso. Por último, cuando se llega a un acuerdo, el dinero es entregado normalmente en mano. Esto se puede considerar una ventaja o un inconveniente, según las preferencias del cliente. Más flexible es a este respecto un préstamo en línea pues, aunque el dinero se recibe en la cuenta bancaria, se puede retirar inmediatamente en cualquier cajero automático.
Pon a la venta lo que no te hace falta
Las páginas web de venta de artículos de segunda mano es otra opción a tu alcance. Su labor es básicamente la de poner en contacto al vendedor y al comprador: el primero establece un precio para un determinado objeto de valor y el segundo lo compra por ese importe o bien por otro que se fija tras una negociación privada. Es una opción inmejorable para quien tiene objetos que ya no utiliza, aunque probablemente suponga desprenderse de artículos con una carga emocional importante. El gran inconveniente de esta modalidad es también el tiempo: lo que se pone a la venta permanece en ese estado por periodo indefinido. Nadie sabe, ni siquiera la web intermediaria, cuánto tiempo permanecerá así: un día, una semana, un mes, un año… Por tanto, no se adapta bien a quienes tienen necesidades inmediatas de liquidez. Una alternativa es la de los establecimientos de compra-venta de segunda mano que asumen ellos mismos la compra del objeto al momento para venderlo posteriormente, percibiendo un margen de beneficio. Sin embargo, ese margen implica que la casa querrá comprar tu artículo por un precio sensiblemente inferior a su valor real de mercado.
Necesito dinero a medio o largo plazo
Cuando la necesidad de dinero no es tan inmediata sino que está relacionada con un gasto o una inversión a medio o largo plazo, entran en juego otras soluciones. Un caso concreto pueden ser las vacaciones, que a menudo se empiezan a preparar desde meses antes. Por muy obvio que parezca, la hucha es un método tradicional que se sigue empleando y que sirve de gran ayuda en muchos hogares. Un préstamo personal online es también una solución adecuada como complemento a lo ahorrado o incluso para adquirir los pasajes de avión o tren con antelación, cuando aún los precios son bajos.
Para inversiones más grandes, como la compra de una casa, se deben valorar otras soluciones de mayor envergadura, como la venta de la casa actual, la solicitud de un préstamo hipotecario en el banco, la inversión en Bolsa o la apertura de un fondo de pensiones, que pueden poner a disposición del cliente sumas de dinero superiores, aunque impliquen a su vez períodos de tiempo más largos y teniendo en cuenta que algunas de esas soluciones conllevan riesgos inevitables (inversión en Bolsa y fondos de pensiones).