La psicología de los prestatarios mexicanos: ¿qué motiva a la gente a pedir un microcrédito?

La psicología de los prestatarios mexicanos: ¿qué motiva a la gente a pedir un microcrédito?

El microcrédito se ha convertido en una importante herramienta de apoyo financiero para millones de personas en México. A pesar de los elevados tipos de interés, el microcrédito sigue siendo popular, especialmente entre las pequeñas empresas, las poblaciones rurales y los grupos vulnerables. Los aspectos culturales y psicológicos son un factor importante en esta demanda. Para comprender mejor esta cuestión, conviene tener en cuenta la mentalidad y la psicología específicas del prestatario mexicano.

Principales motivaciones para pedir un microcrédito

Hay varias razones fundamentales por las que muchos mexicanos prefieren pedir microcréditos. Y la primera de ellas es la accesibilidad y la facilidad de tramitación. El sector bancario impone requisitos estrictos a los documentos, tarda mucho tiempo en estudiar la solicitud y sólo aprueba una pequeña parte de ellas. Mientras que las IMF simplifican el procedimiento reduciendo el número de referencias exigidas a un solo pasaporte. A veces puede ser necesaria una entrevista en vídeo si la solicitud se presenta por Internet.

Pero esta no es la única razón por la que los microcréditos se han hecho tan populares entre los mexicanos. Hay otros buenos argumentos que cabe mencionar.

Necesidad de financiación de emergencia

El microcrédito se convierte a menudo en la única salida para resolver dificultades financieras urgentes. Pueden estar relacionadas con:

  • gastos médicos debidos a una enfermedad inesperada

  • reparar un coche o un electrodoméstico que se avería de repente;

  • comprar ropa, comestibles cuando no hay dinero suficiente para pagar un salario;

  • gastos de educación, realización de cursos para mejorar las cualificaciones.

Muchos mexicanos no tienen ahorros, un colchón financiero en caso de pérdida de empleo o enfermedad. Por eso, es fácil resolver muchos asuntos de dinero con un microcrédito.

Factores sociales

La cultura mexicana tiene un fuerte sentido de comunidad y ayuda mutua. El microcrédito suele percibirse no sólo como un instrumento financiero, sino también como una forma de mantener los lazos sociales y participar en la vida de la comunidad. Los valores familiares y los fuertes lazos con los parientes también son importantes. Por lo tanto, un microcrédito puede pedirse no sólo para uno mismo, sino para ayudar a los seres queridos.

La posición en la sociedad es un factor muy importante para todo mexicano. Algunos residentes piden préstamos a las IMF para poner en marcha un pequeño negocio, como capital inicial o faltante. Si la inversión tiene éxito, los intereses se compensan con los beneficios. En este caso, el préstamo se convierte en lo más útil y racional posible.

Confianza en las IMF locales

A menudo, amigos o conocidos trabajan en las sucursales locales de las IMF. Existe un alto nivel de confianza en ellas. La posibilidad de obtener un préstamo rápidamente, sin procedimientos complicados, fraudes ni burocracia también contribuye a la popularidad de la microfinanciación.

Se puede obtener información detallada sobre un microcrédito y sus condiciones a través de un gestor conocido. Muchas empresas satisfacen las necesidades de los deudores y prolongan el préstamo si no hay nada que devolver en ese momento.

Factores económicos

Gran parte de la población mexicana no tiene acceso a cuentas y préstamos bancarios debido a la falta de empleo formal, bajos ingresos o falta de historial crediticio. Las IMF no imponen estos requisitos, lo que permite obtener dinero incluso con una respuesta negativa de una institución bancaria. Otro factor es el empleo con ingresos inestables. Puede tratarse de un empleo estacional o de ingresos periódicos.

Quién es más propenso a pedir microcréditos

Según las estadísticas, el cliente medio de una organización de microfinanciación es una persona de entre 25 y 45 años con ingresos bajos o inestables. O un aspirante a empresario que quiere poner en marcha o ampliar su propio negocio. El género no importa. Casi por igual, mujeres y hombres solicitan microcréditos.

Los mexicanos son optimistas por naturaleza. A pesar de las dificultades económicas, mantienen la fe en un futuro mejor. El microcrédito se percibe como una oportunidad para cambiar sus vidas a mejor. Por lo tanto, es esencial desarrollar programas de educación financiera y enseñar a la gente a presupuestar adecuadamente.

¿Cuáles son las alternativas al microcrédito?

Se sabe que pedir dinero prestado a las IMF no es difícil para el consumidor medio. Pero si existen dudas de que sea posible devolver la deuda a tiempo, o no se está satisfecho con el elevado tipo de interés, se pueden buscar otras formas de conseguir dinero. Éstas pueden ser:

  • amigos o parientes a los que puedas pedir prestado sin intereses;

  • Bancos, si son accesibles en la región;

  • comunidades de crédito y cooperativas, pero éstas son escasas en México.

Las campañas de publicidad y marketing de los organismos de microfinanciación predominan sobre otros métodos. Por lo tanto, existe una demanda creciente de este tipo de recepción de fondos. Al mismo tiempo, es importante recordar que el dinero debe devolverse a tiempo. De lo contrario, la cantidad crecerá exponencialmente cada día.

Conclusión

La psicología de los prestatarios mexicanos es polifacética y viene determinada por una combinación de factores sociales, económicos y psicológicos. El nivel de conocimientos financieros también influye en la decisión de suscribir un microcrédito. Un enfoque equilibrado del desarrollo de la microfinanciación que incluya educación, tipos de interés más bajos y transparencia puede mejorar significativamente la situación de los prestatarios y fomentar su confianza en las instituciones financieras.

Encuentra los mejores préstamos 2021

Encuentra los mejores préstamos 2021

  • Ofertas personalizadas
  • Una sóla búsqueda
  • Sin comisiones

Respuesta rápida - ¡SIN papeleos!